COMENTARIO EDITORIAL DEL 18-02-18
La semana. Pues como siempre hemos tenido de todo, la noticia que nos vino del exterior nos llega de Florida, donde un perturbado entró en un colegio disparando y matando, algo que parece ya habitual en los EEUU y que todavía no entiendo como nadie le pone remedio. Pero también conviene recordar que son los propios americanos los que prefieren vivir así, en su constitución recogen el derecho a portar armas. Aquí no hay héroes ni historias, hay victimas de un sistema, de su forma de vivir y de morir, por lo tanto no es de extrañar que algo parecido vuelva a suceder en cualquier momento.
En lo que a España se refiere se está hablando de infinidad de cuestiones, la pasión de catalanes, el Gobierno que no sabe que hacer con la enseñanza en Cataluña. Que lo único que tiene que hacer es aplicar La Ley. Encuestas que hacen calentar motores a los partidos. Las pensiones que el Gobierno rescata la banca con dinero de los pensionistas y después te manda hacer un plan de pensiones, eso solo sucede en España. En fin que podíamos calentarnos la cabeza con diferentes cuestiones a la hora de hacer el editorial de hoy. Pero esta semana ha sido el día mundial de la radio.
La verdad que yo creo que la radio es algo más que un medio de comunicación. Desde que a finales de siglo XIX, Guillermo Marconi asombrase al mundo con su artilugio, la radio ha servido como difusora de la cultura, la educación, las libertades y ha informado a millones de personas con una taza de café en la mano sobre los acontecimientos más importantes de la historia de la humanidad.
La radio ha sido nuestra compañera inseparable. Los que hemos tenido la fortuna de que nuestra voz saliese a las ondas a través de las rejas libertarias del micrófono, no nos cansaremos nunca de dar las gracias a este fenómeno sociológico que nos hace cosechar tantos amigos en el mundo. Gracias radio.
García MOLINA
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