lunes, 14 de noviembre de 2011

DOMINGO 13-11-11

La semana: Comenzaba con el debate de los candidatos de los dos partidos mayoritarios y que uno u otro, dependiendo del voto de los españoles, es el que va a gobernar durante los próximos cuatro años, un debate donde se gastó muchos miles de euros no solo en el alquiler del recinto sino en toda la puesta en escena, tanto de personal, comidas y un largo etcétera, los que están en todo momento atentos a todo tipo de datos dijeron que cada palabra de uno u otro candidato costó al erario público 30 €. Pues bien, según los diferentes sondeos realizados por los medios de comunicación, de uno u otro color, el debate fue ganado por Rajoy y no tanto por la calidad de sus propuestas, sino  por la deplorable y demagógica vacuidad de su rival, así como por la desastrosa herencia de los Gobiernos de Rodríguez Zapatero, en ese sentido Rajoy fue muy superior en la forma y sacó el mayor partido de un fondo que al menos era más profundo que el de Rubalcaba,  sin embargo a pesar de ese resultado indudable, no se puede evitar llegar a la conclusión de que en el debate del lunes los silencios pesaron tanto como las palabras. Ambas partes evitaros referirse a la corrupción política, sin que pronunciaran una sola frase sobre casos como el Gurtel, El Campeón, Los eres de Andalucía y demás. Ambas partes evitaron hablar de un gasto público que tiene terribles nombres propios como Barrera, Bono, Chaves, Montilla o Alberto Ruiz Gallardón. Ambas partes no dijeron ni pio del los avances de las últimas investigaciones sobre el 11 M. Ambas partes no mencionaron a las víctimas del terrorismo y dieron por buena la idea falsa de que el terrorismo de ETA ha concluido, aunque aceptando que habría que dar nuevos pasos en el futuro. Ambas partes, se negaron a mencionar el grave peligro que acecha tanto a una Cataluña gobernada por nacionalistas que han convocado un referendo independentista, como unas vascongadas que pueden verse controladas por ETA el año que viene y para remate, Rajoy se negó a abordar temas como la reforma de la ley del aborto, el futuro de los matrimonios homosexuales, si el Tribunal Constitucional los considera Constitucionales o la eutanasia. En definitiva, aparte de unos silencios que cuesta mucho ver que no fueron  pactados, dio la sensación de que Rajoy hará lo posible para mejorar la situación económica y reducir el paro, pero que no se va a oponer al cambio de régimen impulsado por Rodríguez Zapatero y los nacionalistas. Un cambio de régimen que comenzó con los atentados del 11M, que continuó con el estatuto de Cataluña y que ha llegado hasta la presencia de ETA en las instituciones, ante este panorama la pregunta es obvia ¿se  podrá lograr una cosa sin la otra? y esa pregunta lamentablemente se sigue sin responder y sigue en el aire porque ninguno de los dos candidatos, ni lo dijeron el lunes ni en los diferentes  mítines que durante la semana están pregonando por la geografía española.
Por otro lado esta semana también se habló de otras muchas cosas, como la posible Europa de las dos velocidades, de la situación económica que vive el país. La entrevista en el diario GARA a ETA. Así como nuevos escándalos de corrupción donde está implicado el yerno del Rey de España, que no aparecen los millones por ningún sitio, lo que demuestra que deben de estar a buen recaudo en algún paraíso fiscal. Por si acaso. 

García MOLINA

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